domingo, 5 de abril de 2015

Rarezas VIII

Todos deseamos ser distintos porque ya nadie lo es, buscamos demostrar qué somos mejores que otros cuando no llegamos a ser el mejor de nosotros mismos. Yo he intentado ambas cosas, ciertamente es difícil querer ser diferente, pero en si, ya lo somos. Nadie es igual a nadie y quién me diga que las personas normales existen, aunque no lo creas, esa persona está loca. Si podemos definir la normalidad en los seres humanos, se podría obtener qué a muchas personas se sienten atraídas por cosas semejantes y cuando empezamos a ver, ya es normal qué les guste tal cosa o tengan un gran número de aciertos en sus personalidades. Yo no soy normal, no soy diferente, soy humano, somos imperfectamente idóneos, somos la raza utópica de una manera agresiva y pasiva, dependiendo de los tiempos. Aunque le hagamos daño a todo y a todos, somos perfectos, porque aquí en este mundo no hay leyes escritas o validas por dioses ni nada transcendental, sólo son leyes que han hecho los humanos "normales" dictando a su propia conveniencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta de una manera eficaz y sana.